martes, febrero 14, 2006

Caprichos gravitatorios

Photo by Arteko

Me enteré por casualidad, en una de esas conversaciones intrascendentales post ingesta de las maravillosas viandas de servicio de "catering" de mi adoradísimo trabajo, que todavía quedan tesoros por descubrir y no hablo de aquel que trabajando en el Parque del Retiro podando le caiga en su cabeza un fajo de millones de nuestras queridísimas y humildes pesetas (caprichosa ésta gravedad ) sino descubrir un nuevo mundo en el nuestro con distintas evoluciones en las especies conocidas. Lástima que no hayan aparecido nuevas razas humanas, aunque fuese algo mejores que la nuestra, asunto que no creo demasiado complicado.

Total, que seguimos con la nuestra, especie autodistinguida por colores que nos permitimos llamar razas y, en muchas ocasiones, por creencias más parecidas a mentalidades del Pleistoceno.

La verdad es que por más que he hecho firme propósito de hacer caso omiso a la estupidez humana con respecto a la obcecación en temas religiosos, no puedo evitar comentar que el tema omitido hasta ahora, va para largo:

Las exacerbadas quejas de radicales islámicos sobre las irreverentes caricaturas de Mahoma, para qué comentar más, la "gracia" les está llevando del cabreo a la furia.

El asunto para mí no trata tanto de una religión en concreto sino de las religiones en general ( vamos, que podría empezar con la católica y no sé si sabría parar ).

Tampoco se trata de crear dos frentes “ellos” y “nosotros”, “Oriente” y “Occidente” siempre aparentemente enfrentados. Lo que me parece que lamentablemente son todos los radicalismos que conozco (muy probablemente se me escape alguno que sea excepción), porque todos me parece que tienen un fondo de estupidez y falta de miras supina.

Se trata de los fundamentalismos ¿cómo puede alguien considerar tener la verdad absoluta y por ello crear unos fundamentos de vida que no sólo sean aplicables a uno mismo sino también al resto de la humanidad? y peor aún ¿cómo son capaces de demostrar su indignación de esa forma que hace perder todo sentido a su reclamaciones?

Qué pensarían si un frente de mujeres histéricas defendiese la igualdad de género quemando cualquier empresa que dirigiesen sólo hombres? (vaya, mal ejemplo, en este caso todos felices con vacaciones obligatorias).

No creo que se pueda reclamar respeto mediante la falta total del mismo. Es la radicalidad de los radicalismos, la que creo que es una caricatura de cualquier posición.

Lo último, creo que apropiado para el asunto, y para que vean que no es un asunto iconoclasta, sino que trata de antirradicalismos, les dejo una cita de Emilio Galindo Aguilar (sacerdote católico español, Granada 1927-) en su libro "Sólo a tí voy buscándote" (1998):

"Nada temen tanto los hombres de religión como a un creyente libre, educado por el Espíritu; pues no sólo se les escapa de sus dictámenes, leyes y normas, y del control que ello les permite, sino que puede «pervertir» a los demás contagiándoles el gusto por el pensamiento libre, la manía de los ojos abiertos, la ilusión por la vida auténtica".

¿Encontraremos en alguna pequeña isla al ser humano evolucionado que parece no existir en territorio conocido?¿no habíamos bajado ya del árbol o será que sencillamente nos caímos de él como un simple capricho gravitatorio?

8 comentarios:

Unknown dijo...

¡Qué peleas tengo hoy con el Blog!, parece que decidió borrar de "motu proprio" los comentarios, o por lo menos si he sido la autora de semejante desaguisado, no sabría volver a hacerlo.. como también los recibo por email, me tomo la licencia de publicarlos bajo la identidad de los autores de los mismos.

Gabi dijo: "Podría firmar el texto integro, desde la primera a la última lí­nea. Creo que puedo ser capaz de entender casi todas las miserias del ser humano, pero con el fanatismo no puedo.
Me temo que al ser humano, en general, le faltan millones de años de evolución para llegar a ser algo minimamente defendible.
Me temo que no dará tiempo.
Besos"

Solodelibros dijo:"Las caricaturas de Alá¡, o mejor, el revuelo que han organizado, son exactamente lo mismo que las armas de destrucción masiva que supuestamente tení­a Irak. Es decir, son la excusa para entrar a sangre y fuego en un país soberano. Con el beneplácito de los países europeos y de sus opiniones públicas, a las que les están vendiendo la moto del "que malos y retrógrados son estos musulmanes, acabemos con ellos". Un poquito de criterio... "

(Disculpen el desastre)

Mandy dijo...

Jajajajajajajajajaaa
No mire la paja en ojo ajeno cuando usted misma tiene un blog clavado en el suyo!!!! ay!
jajajajajajajajajajajajajaaa
jajajajajajajajajajajajajajaaa
Marea blanca: es usted unica y genuina.
Mua!

Alfredito dijo...

Te copio la columna que Eduardo Mendoza escribió el lunes en El País:

"Sumo la mía a las opiniones expresadas estos días sobre la crisis de las caricaturas de Mahoma, porque pocas cosas tengo claras, pero ésta sí.
Estoy de acuerdo con los que reclaman más respeto hacia los sentimientos de los islamistas. Pero no estoy de acuerdo en la forma de manifestar este respeto. Parto de la base de que no se debe coaccionar a ningún medio de expresión que quiera hacer chirigota de Mahoma o de quien sea, santo o laico, vivo o muerto. La libertad de expresión no consiste en decir lo que a uno le apetece, sino en aceptar que los demás hagan lo mismo, nos guste o no. Y obtener esta libertad ha costado muchas cabezas y muchas miserias. Hay que respetar los dogmas ajenos, pero los nuestros, también, y para mí la libertad de expresión es tan sagrada como puede ser Mahoma para el imán de Elsinore.

De modo que adelante con las caricaturas y tres hurras por Charlie Hebdo. Si por esta causa algunos quieren dar brincos, pegarse puñetazos en sus propias cabezas y amenazar al mundo, son muy libres de hacerlo. Yo les sugeriría que en vez de canalizar sus lamentos y su rabia hacia los excesos de nuestra libertad, los canalizaran hacia los defectos de la suya, pero allá ellos.

Comprendo la preocupación de los gobernantes que ven venir el lío y piden comedimiento, pero argumentar que no se deben hacer según qué cosas no porque estén mal, sino porque otros se pueden poner de los nervios, es tratar a estos otros como si fueran el tonto del pueblo, cosa que en este caso puede parecer justificada, pero no lo está.

Los mahometanos no son unos desequilibrados. Ciertas manifestaciones públicas, de las que el terrorismo es la más aparatosa, contaminan en el imaginario colectivo a la comunidad de donde surgen. El respeto nos impone luchar contra esta generalización.

Me niego a que me identifiquen con las torturas en Abu Ghraib y me niego a pensar que todos los musulmanes se traen un mal rollo con Mahoma. Unos cuantos sí. Es su problema. Si nos los traen a casa, garrotazo y tente tieso.

Al margen de esto, no tenemos por qué ejercer unos miramientos que tienen algo de paternalista y de colonial. Que cada cual en su casa haga lo que quiera, incluidos los daneses. No se van a pasar la vida viendo películas de Dreyer."

*Eduardo Mendoza
de El País de Madrid

Besitos, guapísima

Unknown dijo...

*Gabi, siempre hay un poquito de esperanza, yo la guardo en un frasquito y de vez en cuando, esparzo gotitas que espero inunden corazones ;)

*Solodelibros, ante todo agradecerle de nuevo su visita y volver a disculparme por haberle dado semejante bienvenida borrando su comentario.. :(

Alego en mi favor, que normalmente soy algo más hábil con las publicaciones.

Le digo lo mismo que a Gabi, si sé que no soy única, sé que habrá más personas que opinen como yo/nosotros y ésto a su vez, significa que hay esperanza.

Hay un proverbio árabe que dice: "no creas todo lo que oyes, porque el que cree todo lo que oye, muchas veces, juzga lo que no ve".

*Miss Mandy Cat..jajaja..¿para qué comentar?... :):):)

*Querido Alf, gracias por la información. Como siempre, exquisitamente oportuno. ;)

Fdo.: tu dolenta

*A todos, oleadas de besos esperanzados.

Gatopardo dijo...

Desde que tendemos a reunirnos en tribus hasta nuestras frágiles sociedades, estamos condenados a despreciar al otro por cuanto no cuadra en nuestra idea de "lo correcto". Los musulmanes tienen razón en protestar contra esas caricaturas, tanto como nosotros la tenemos al protestar contra sus actos fundamentalistas (no digo terrorismo, pues el único y más peligroso terrorista está sentado hurgándose la nariz en la casa blanca, pensando seguramente en nuevas atrocidades).

Coincido con Gabi en que faltan miles, tal vez millones de años para que la humanidad llegue a la practicar el respeto y la tolerancia. Es cierto. Puede que no lleguemos.

Un abrazo, AlbiMarina

Unknown dijo...

*Mi buen Gatopardo, los ejemplos esperanzados escasean, pero no cejaré en mi empeño de mantener un ápice de esperanza.. ¿a caso no están aquí ustedes demostrándolo?

Oleadas de besos

cubautor dijo...

Marea Blanca, marea blanca... eres poesia aunque sin rostro.
tengo la humilde necesidad de buscarle un rostro a las palabras, pero tu nombre no ayuda. leo y leo, escucho sonido tras sonido, tarareo tu escritos como si fuesen canciones y entonces aunque bestialmente lo intento, no alumbra en la imaginacion un rostro dulce de marea blanca. quizas te falte sonrisa... o quien sabe y voy perdiendo mis ojos.
aun asi: eres dulce.

Unknown dijo...

*Cuba, gracias por su visita, su interés, sus comentarios, su ternura, su ritmo..

Oleadas de sonrientes besos.