Silba en el viento dentro de mí. Estoy desnuda. Dueña de nada, dueña de nadie, ni siquiera dueña de mis certezas, soy mi cara en el viento, a contraviento, y soy el viento que me golpea la cara.
(Galeano)
martes, noviembre 29, 2005
Viejecito Pinochet, Pinochito
Pobrecito mi viejecito, que perdió la memoria de 30 años atrás. No recuerda cuando todavía con a sus 60 jugueteaba a ser dios con sus soldaditos de corazón de latón, que de puro óxido habían dejado de utilizar.