Historias
increíbles
- - ¿Te
gusta la canción que he puesto?
- -
Sí,
me recuerda un poco a Bob Dylan, ¿no?
- - Bueno,
era de la época de Bob Dylan, pero no lo conocía nadie... dicen que murió
inmolado en un escenario.. no se sabe muy bien cómo fue la historia...
Y así es como me enteré de la existencia de Sixto Rodríguez (Jesús Sixto Díaz Rodríguez). Y así es cómo vi el documental sobre su estrambótica historia, "Searching for Sugar Man",
de la que hago un breve resumen, pero ya les advierto, lo haga como lo haga, la historia les va a parecer muy muy
extraña, pero, y discúlpenme por
utilizar una expresión tan manida, tengo que decirlo, muchas veces “la realidad
supera a la ficción”.
Primera historia: triste historia de un músico.
Sixto Rodríguez, en un cantautor que grabó un par de discos en los
principios de los años setenta. Estos dos álbumes los firmó con una compañía
discográfica llamada Sussex. Por un lado, aunque de forma incomprensible una
vez se escuchan, ninguno de los dos discos tuvo una gran acogida y por otro, la
compañía acabó por cerrar poco tiempo después. Hasta aquí la historia normal,
lamentablemente como la de montones de artistas en esta época y como tantas
compañías que corrieron la misma suerte.
Segunda historia: exitosa historia de un disco.
Cuenta la leyenda que llegó a tierras de Sudáfrica una muchacha americana.
Dicen que llevaba un disco con ella. Dicen que ese disco se extendió como la
pólvora por aquellas lejanas tierras. Aseguran que el disco forma parte de la
historia de Sudáfrica y de la lucha cotra el apartheid. Relatan que fue fuente
de inspiración para una generación entera de Afrikaans.
Tercera historia: “Cold Fact”.
Un hombre encuentra un mensaje como lanzado en una botella en su disco
favorito para cualquier investigador musical que quiera averiguar algo sobre el
artista. El mensaje llega. El investigador musical se pone manos a la obra:
saber quién era ese hombre que marcó a una generación y del que nadie sabe
nada, excepto que se levantó la tapa de los sesos en medio de un concierto.
Cuarta historia: Eva.
Detroit. La hija de un humildísimo obrero de la construcción encuentra un
anuncio en internet. Parece una broma de mal gusto. Ve la cara de un hombre en
un tetrabrick y el título de la pagina es un llamamiento pidiendo ayuda para
localizarlo. La foto es de hace más de 20 años, pero le reconce sin duda
alguna. Le reconocería en cualquier lado. Eva escribe un mail al contacto de la
página, claro que sabe quién es y dónde está. Es su padre.
Quinta historia: Sixto y Sudáfrica.
El
disco y su creador unen por fin la línea de su historia. Sixto descubre
que es un icono musical para un continente entero. Sudáfrica le espera
ansiosa, con los brazos abiertos. Como una amante que tuvo un affair que
mantuvo en su cabeza viviendo de un sueño, esperando algún día poder
conocerlo.
Para Sixto han pasado muchos años, más de una veintena, pero se entrega
con la
humildad de una mano experta. Está vivo, siempre le han mantenido vivo.
Sexta historia: dinero.